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El Lazarillo de Tormes: La nueva aventura

La noche del jueves 24 de noviembre de 2016, la agrupación caraqueña “Cuenta Peregrino” llenó de encanto la sala José Daniel Suárez del Complejo Cultural Mauricio Pérez Lazo con la puesta en escena del clásico de la literatura universal “El Lazarillo de Tormes”, versión del dramaturgo Cruz Noguera y la producción general de Nancy Ortuño. Dicha obra fue interpretada por Andy Pérez, Somar Toro y Esther Jaspe, actores que encarnaron las fortunas y adversidades de la España del siglo XVI para que el público sancarleño pudiera apreciar el tratamiento del tema y lo trasladara a nuestra realidad actual, ya que en el mundo sigue reinando la avaricia, la indolencia y la deshonestidad.  Lázaro (personaje principal de la obra) desde niño tuvo que servir a un ciego timador que lo enseñó a golpes a ser astuto, a un sacerdote que con su doble moral lo hacía pasar hambre, a un escudero que aparentaba lo que no era, a un arcipreste de modos licenciosos, en fin, tuvo una vida llena de peripe...

Mi amigo y la Sayona

Cuenta historias de esas que cuentan los llaneros, de parrandas y aguardiente, de conquistas y caminos, pero sobre todo de espantos y aparecidos. Con una llave sacó su última pella de chimó y exclamó con tono encapotado: -ponga cuidao, porque esta no se la voy a contar dos veces.  Aquel día, por la borrachera, olvidé que el reloj se me había descontrolado. Cuando llegué a casa luego de varios litros de Cocuy en el juicio, no tenía noción del tiempo, pero mi alarma seguía puesta a las 5 de la mañana, la hora de pararse a trabajar. El Casio estaba adelantado 5 horas y cuando pilló, en realidad eran las 12 en puntico. Sentía la pea igualita, así que decidí echarme un palito antes de irme, ya sabe, pa’ cogé bríos. El litro quedó entre los camburales, ahí lo escondíamos siempre. Estaba solo a 2 cuadras, monté la bicicleta y me fui poco a poco. En eso vi parada en la entrada de la capilla del pueblo a una mujer buena moza, alta y flaca, melena larga y de vestido blanco. La...

Semifinal insólita

Esta historia, una vivencia real, fue escrita en homenaje a la memoria de Alex Rodríguez, a quien todos llamábamos el número 1, y al histórico equipo múltiple campeón en los campeonatos de beisbol rural estadal que organizaba el profesor José Coromoto Romero Mena, los Leones de Las Vegas.   Aquel torneo defendíamos título y te echábamos de menos, te fuiste de repente dejándonos sin tu alegría, sin campo corto y sin tercer bate, pero en aquella semifinal contra Lagunita estuviste allí, estoy seguro.  Parecíamos dormidos, las curvas envenenadas de Benigno Salas nos mitigaron durante 7 entradas. Nuestro lanzador, Erickson Zerpa, había permitido solo 1 carrera en la baja de la tercera. En la alta de la sexta, cuando una nube gris y cargada se precipitó sobre el terreno del Estadio Municipal de Las Vegas obligando a parar el juego, todos en el dogout nos mirábamos y, sin mediar palabra, pensábamos en ti y en la fuerza de tu fe para subir el ánimo del equipo, era como si en...

AL FINAL SOMOS SOLO RECUERDOS

Por mera intuición, se encontró caminando hacia el lugar al que siempre convergía, extrañado de ver en las afueras del estadio municipal un cuantioso número de vehículos parqueados, decidió entrar de igual forma, solo deseaba tener contacto breve con el sublime espacio donde compartió muchos instantes de su vida, y que con solo pisarlo le recreaba un álbum en la memoria de grandes batallas, de alegrías y nostalgias, de sonrisas y lágrimas. Una vez cruzó la puerta principal, divisó muchas personas dispuestas alrededor del diamante, formando una especie de U en derredor de un sarcófago posado sobre un pedestal detrás del home play, en sus patas yacían coronas de flores, bates, guantes, balones, micrófonos, audífonos, cámaras fotográficas y de video, libretas de anotaciones, libros y franelas color vinotinto. Curiosamente, el vinotinto dominaba entre la multitud apostada en el lugar, otros más jóvenes vestían uniforme de pelotero con camiseta roja y letras blancas, lo mismo que la gorr...

Mi Prima

Elena es una mujer con la belleza oculta tras sus enormes ojeras, con la inocencia guardada en el equipaje de la juventud perdida y el autorespeto dormido en algún lugar de su complejo mundo interno. Su voz es suave pero habla rápidamente. Colecciona bolsos, tiene cualquier cantidad; sus amigas le dicen que hasta cuándo los comprará y se limita a responder que quiere uno por día, es decir, quiere llegar a tener trescientos sesenta y cinco y está a punto de lograr la ansiada cantidad. Trabaja de noche. Es prostituta. Ni ella misma sabe por qué llegó a ejercer esta profesión. Cierto día comenzó y ya tiene ocho años ejerciéndola. Aún no ha pensado en alejarse del oficio, se ha acostumbrado; hasta podría decirse que se siente cómoda. No es de por aquí, es de la costa y por sus ojos profundos y tristes puedo asegurar que los llenó de olas, que los llenó de mar en las largas horas de contemplación de su infancia. Una vez recordó a su madre, recordó como nadaba desnuda en las mañanas...

EL CADÁVER MÁS BELLO QUE HA PRODUCIDO LA HISTORIA

Francisco José Aguiar Hay hechos que no pueden desaparecer y hay hombres signados por el destino para encarnarlos. Uno de estos hombres es el subteniente Luis Antonio Rivero Sanoja, a  quien por la autoridad que me han conferido sus deudos dedico este canto. Famosas son las gráficas tomadas por Héctor Rondón y José Luis Blasco de la rebelión que sucedió en Puerto Cabello el 2 de junio de 1962. Hartos son los ensayos y monografías que se han realizado a raíz de este acontecimiento, pero poco se ha escrito sobre la conmoción de la familia cojedeña por la pérdida de uno de sus más queridos hijos. Los sancarleños de la época recuerdan la misa que ofició el párroco Patricio Palacios en la catedral en honor al oficial caído en acción en El Porteñazo y el cortejo fúnebre multitudinario que lo condujo por la calle Silva hasta el Cementerio Municipal. Esta historia la he escuchado muchas veces porque era un militar querido por su pueblo, tanto es así, que pese a las décadas que h...

EL PRÍNCIPE PERDIDO (CUENTO INFANTIL)

La abuela concluyó su faena en el corral, con premura cambió el agua de tres pollos que arribaban a dos semanas mientras la gallina decapitada minutos antes despedía sus últimos suspiros de agonía, sería la encargada de sazonar el caldo que repondría las fuerzas de su nieta, quien pasó la mañana con los vómitos imprevistos que tanto acongojaron sus primeros años de vida. La niña, sentada en el afable piso de la vivienda y distraída del reciente quebranto, jugaba con dos pequeños muñecos de plástico que había extraído como únicos atractivos de una casa de muñecas que su madre le había obsequiado semanas atrás, eran una princesa y un príncipe, pero algún encanto especial guardaba este último, lo mimaba con exclusiva atención y se angustiaba cuando no podía encontrarlo en su caja de cachivaches, era sencillamente su predilecto. El frágil plástico cedió extenuado por las mil batallas libradas en sus sudorosas manos, una parte de su diminuto brazo izquierdo se desprendió mientras ella lo...